Cuento "El girasol dormido"

    Hoy la seño nos ha leído el cuento "El girasol dormido", una historia muy sencilla que a los peques les ha encantado.

"Érase una vez un campo de girasoles relucientes. Una mañana de sol radiante, brotó un pequeño girasol. Era tan pequeño que no podía abrir los ojos, porque La Luz brillante del Sol lo deslumbraba, así que, poco a poco, con movimientos aún de bebé, cerró los ojitos mirando al suelo. En medio de miles, de millones de girasoles de todo el mundo que miraban al Sol y se nutrían de él, en medio de todos ellos, estaba él, cara al suelo con los ojitos cerrados, apretándolos bien fuerte. Nuestro pequeño girasol fue creciendo y poco a poco descubrió que no siempre estaba el Sol allá arriba.

Así que se dio cuenta de que todos los días a una hora determinada, el cielo cambiaba a un color más oscuro. El sol se manchaba y dejaba paso a una luz más tenue, más dulce. ¡Era La Luz de la Luna! Y justo, entonces, los demás girasoles se iban a dormir.

Noche tras noche, mientras los demás girasoles dormían, el pequeño girasol les cantaba nanas.

Cuando amanecía y la Luna se iba a dormir dejando paso a su amigo el Sol, estaba tan, tan cansado, que si cerraba los ojitos para que La Luz de Sol no le molestara, se quedaba dormido.

En medio de miles, millones de girasoles de todo el mundo dormidos y cabizbajos, en medio de todos ellos, estaba él, el pequeño girasol abierto de par en par, asomado a la noche, con una sonrisa de satisfacción dejándose mimar por la luz de la Luna."

Adaptación del cuento El girasol de Luna

    Al terminar de leer el cuento y hablar un poquito sobre él, hemos elaborado un dibujo de la historia, los pequeños han dibujado un campo de girasoles y allí estaba el girasol dormido, el personaje más representativo del cuento.

    Y también hemos jugado a dramatizar el cuento, nos hemos disfrazado de girasol, sol y luna, los alumnos eran los personajes, lo hemos pasado genial.

Estaban entusiasmados y todos querían participar... el cuento ha sido un éxito. 

      Cuando estaba el Sol... el girasol dormía...

    Pero cuando era de noche y salía la luna, el girasol se despertaba...

    Los peques lo han hecho genial y han disfrutado un montón, el la próxima sesión jugarán sus compañeros, y dejaremos los disfraces en el rincón del proyecto para que puedan disponer de ellos y jugar libremente también.